Autor: LUCY SCORE
La autora número uno en ventas del New York Times, Lucy Score, regresa a la dulce y picante Knockemout, Virginia, con la historia de Lucian y Sloane.
Sólo había una mujer que podía liberarme. Pero prefiero prenderme fuego antes que pedirle algo a Sloane Walton.
Lucian Rollins es un magnate delgado y mezquino que busca venganza. En una búsqueda para borrar la marca de su padre abusivo en el apellido, pasa cada minuto de vigilia moviendo los hilos y construyendo su imperio. Cuanto más dinero y poder gana, más seguro se siente.
Excepto cuando se trata de un bibliotecario luchador de un pueblo pequeño...
Unida por un viejo y oscuro secreto del pasado y su actual desdén mutuo, Sloane Walton confía en Lucian hasta donde puede llegar a su cuerpo vestido de diseñador.
Cuando las discusiones accidentalmente se convierten en juegos previos, las llamas se avivan y es imposible apagarlas nuevamente. Pero con Sloane más que lista para formar una familia y Lucian negándose siquiera a considerar la idea del matrimonio y los hijos, estos enemigos a amantes están atrapados en un callejón sin salida.
Hasta que Lucian aprende por las malas que dejar a Sloane es imposible; lo mínimo que puede hacer es mantenerla a salvo.
IDIOMA ORIGINAL
#1 New York Times bestselling author Lucy Score returns to spicy-sweet Knockemout, Virginia with Lucian and Sloane's story.
There was only one woman who could set me free. But I would rather set myself on fire than ask Sloane Walton for anything.
Lucian Rollins is a lean, mean vengeance-seeking mogul. On a quest to erase his abusive father's mark on the family name, he spends every waking minute pulling strings and building his empire. The more money and power he gains, the safer he feels.
Except when it comes to one feisty small-town librarian…
Bonded by an old, dark secret from the past and their current mutual disdain, Sloane Walton trusts Lucian about as far as she can throw his designer-suited body.
When bickering accidentally turns to foreplay, the flames are fanned, and it's impossible to put them out again. But with Sloane more than ready to start a family and Lucian refusing to even consider the idea of marriage and kids, these enemies-to-lovers are stuck at an impasse.
Until Lucian learns the hard way that leaving Sloane is impossible―the very least he can do is to keep her safe.